Tuve un compañero de apartamento que podía vivir a punta de esta dieta. A mí me parece un poco exagerado comer lo mismo todos los días, pero de vez en cuando es increíble. La receta de hoy es mi versión casera y eso quiere decir, la que tiene más cariño.
INGREDIENTES:
- 2 tazas de macarrones (puedes usar conchitas, tornillos, coditos o penne)
- 1 taza de queso cheddar rallado
- 1 taza de leche
- 2 cucharadas de harina de trigo
- 2 cucharadas de mantequilla
- Sal y pimienta al gusto
PREPARACIÓN:
Pon a preparar la pasta en agua caliente sin sal según las indicaciones del empaque. Mientras tanto, pon a derretir la mantequilla en una sartén a fuego bajo. Cuando esté derretida agrega la harina, la sal y la pimienta y mezcla bien hasta que esté suave. Retira del fuego y agrega la leche revolviendo bien. Ahora lleva esta mezcla de nuevo al fuego hasta que hierva, revolviendo sin parar hasta que empiece a espesar. Agrega el queso y revuelve hasta que se derrita.
Escurre la pasta y agrega la salsa sobre ella. Mezcla un poco y sirve de una. Si quieres gratinarla, espolvoréale queso parmesano y ponla en el hornito tostador durante 10 minutos.
Aquí otras propuestas unas más fáciles y rápidas que otras:
Fuente: De la Primera Receta: Lo que se cocina en esta casa